“Dios todopoderoso, lamento ser ateo ahora, pero ¿has leído a Nietzsche? ¡Un libro estupendo! Dios todopoderoso, voy a jugar limpio. Voy hacerte una proposición. Haz que sea un gran escritor y volveré al seno de la iglesia. Y otro favor, Dios de mi vida: haz que mi madre sea feliz. El viejo no me preocupa; él tiene su vino y su salud a prueba de bomba, pero mi madre me preocupa. Amén.”
Pensé que encabezando este comentario con la original plegaria que John Fante incluye en su novela Pregúntale al polvo, me iba a asegurar un par de lector@s.
John Fante nació en Estados Unidos
en 1909. Hijo de inmigrantes italianos, tuvo que vivir en carne propia la
discriminación en su país de origen, por no ser “estadounidense por los cuatro costados”. En Pregúntale al polvo, -la
novela que acaba de llegar a los estantes de nuestra biblioteca-, nos
encontramos con un prólogo de Charles Bukowski, en el que nos cuenta que en una
época de su juventud, -me refiero a Bukowski, no a Fante-, vivía como vagabundo
y pasaba mucho tiempo en las bibliotecas públicas; para leer, sí, pero sobre
todo para estar en un lugar más confortable que la calle. Muchos “colegas”
vagabundos dormían detrás de algún libro. Bukowski tomaba libros de los
estantes e intentaba leer. En general todos le parecían aburridos, poco
atractivos, y los dejaba luego de unas cuantas líneas. Hasta que se
encontró con un libro de Fante; leyó un par de páginas y ya no pudo parar. Nos cuenta: “Las líneas se encadenaban con soltura a lo
largo de las páginas, allí había fluidez. Cada renglón poseía energía propia y
lo mismo sucedía con los siguientes. (…) He ahí, por fin, un hombre que no se
asustaba de los sentimientos. El humor y el sufrimiento se entremezclaban con
sencillez soberbia. Comenzar a leer aquel libro fue para mí un milagro tan
fenomenal como imprevisto. ”
Entre los libros que recibimos, publicados por Editorial Anagrama, se encuentran los que vemos en la imagen que acompaña este comentario: El grito silencioso de Kenzaburo Oe, Queer, de William Burroughs y Pregúntale al polvo de John Fante. Obras completas (y otros cuentos) de Augusto Monterroso que también aparece en esta colección de Anagrama, no lo conseguimos, pero tenemos Cuentos, de Alianza Editorial, con una muy buena selección de cuentos de Monterroso.
La Biblioteca del I.F.D.C. tendrá sus puertas abiertas al público hasta el viernes 21 de diciembre. L@s esperamos.
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